Muy importante mantener en perfectas condiciones la fachada de un edificio, de ahí que no deba de pasarse por alto todo el mantenimiento que requiere y la necesidad de renovar la pintura cada cierto tiempo.
La pintura de la fachada, además de ser la parte visible del edificio, ofrece protección contra las diferentes condiciones climáticas frío, calor, lluvia, y posibles humedades producidas por filtraciones que podrían ocasionar serios daños a la estructura.
La pintura es la capa encargada de brindar protección al inmueble contra las diferentes condiciones climáticas, actuando como una gran barrera ante posibles filtraciones de agua que podrían dañar y ocasionar serios daños a la estructura.
En el mercado podemos encontrar distintos tipos de pintura aptos para pintar la fachada de una casa y que deben de seleccionarse según características de la superficie a aplicar y condiciones meteorológicas a la que esta expuesta.
Importante que la pintura de exterior a elegir:
Se recomienda pintar la fachada a la llegada de la primavera en la que no encontramos un exceso de frío ni de calor, ni humedad en el ambiente.
Para asegurar que la conservación de la vivienda sea la adecuada, se aconseja pintar la fachada cada 4 o 5 años, aunque esto va a depender del estado y deterioro que presente la misma.
Entre las mejores pinturas que encontramos en el mercado para pintar fachadas encontramos:
Para la obtención de un resultado inmejorable es importante:
Calcular los litros de pintura Preparar el resto de materiales y herramientas como rodillos, brochas, cubetas para mezclar la pintura, escalera o incluso instalar un andamio si la fachada mide más de 3 metros de alto para trabajar con mayor seguridad.
Con la ayuda de un cepillo metálico rascar y eliminar todo resto de suciedad. Si la fachada es de grandes dimisiones utilizar un limpiador de fachadas con agua a presión que ayude despegar el polvo y la mugre incrustada.
Reparación de grietas y desconchones con masilla reparadora para exterior. Una vez seca la masilla lijar la superficie reparada para conseguir un acabado liso y perfecto. Aplicar una capa de imprimación o fijación para que la pintura se adhiera sin problema alguno sobre las reparaciones realizadas en la fachada. Importante esperar un mínimo de 24 horas para aplicar la primera capa de pintura en tu fachada.
Proteger el suelo con mantas viejas o cartones, y los marcos de las puertas y ventanas de la fachada con cinta de carrocero ancha.
Para salvaguardar la seguridad importante utilizar material de protección laboral como guantes, cascos, mono,…
Mezclar la pintura elegida para que se vuelva homogénea. Comenzar a pintar por las esquinas y con un rodillo cubrir el resto de la fachada de forma vertical de arriba hacia abajo.
Para un acabado perfecto se recomienda no pintar la fachada de una casa a pleno sol o con temperaturas superiores a los 25°, ni con heladas o lluvias.
Para un resultado óptimo, antes de aplicar una segunda capa de pintura respetar el tiempo de secado.
Una vez esté todo seco, retirar los elementos de protección (cinta de carrocero, cartones, mantas…). Finalizado todo el proceso, la fachada quedará como nueva por lo que es momento de disfrutar del resultado.
Como puede observarse, con las herramientas necesarias y pintura de calidad, pintar una fachada no es una labor difícil de realizar aunque si no sabe como acometer el proyecto, o no sabe el tipo adecuado de pintura a utilizar no dude contactar con profesionales del servicio.